ISLA DE TAVIRA-ALGARVE-PORTUGAL

            


  Hoy vamos a ir a la isla de Tavira. Salimos de Albufeira y por la autovía llegamos al pequeño pero coqueto pueblo de Tavira. Unos indicadores nos irán marcando por donde se va a la isla de Tavira. Antes del embarcadero hay varios restaurantes y aparcamientos donde dejar los coches aparcados. El billete de ida y vuelta  ronda los 2.80 E. Unos pequeños barcos  nos trasportarán hasta la otra orilla. La distancia puede ser de unos quinientos metros. La travesía no dura más de 15 ó veinte minutos entre embarque, trayecto, y desembarque. La isla está bastante bien dotada,  para que el visitante no tenga  falta de todo lo necesario para pasar un día de playa. Al comienzo de la isla encontraremos una gran concentración de establecimientos de todo tipo donde hay bares, restaurantes ,chiringuitos ,un super y hasta un camping, todos ellos muy bien preparados y bien dotados.Podemos alquilar  tumbonas, parasoles tablas de Winsurf  y todo lo necesario  para el relax y el disfrute. No nos imaginábamos que una playa que publicitan medio natural-salvaje,tuviese tanta cantidad de vida urbanita en su suelo, pero debe ser el precio que hay que pagar para que los lugareños tengan algo que llevarse a la boca. Ver para creer.

                                                 

 Esta es la entrada propiamente dicha del arenal de Tavira después de pasar los chiringuitos de entrada a la isla.

                                   

 En algunos tramos lo suficientemente grandes podemos encontrar la playa un poco urbanizada con toda clase elementos al uso de cualquier playa  moderna.

                                      

 Entre los tramos urbanizados podemos andar varios  kilómetros sin encontrar nada de civilización, donde la calma y la soledad se dan la mano y el pasear se hace  indispensable.

                                     

  Los ecologistas y artistas de lo efímero recogen los residuos que arrastra el mar hasta la orilla para formar estos trabajos escultóricos  que le dan al lugar un aire vanguardista y novedoso.

                                              

 La playa es descomunal y fabulosa en toda su extensión.

                                         

  Playa en estado puro y casi salvaje .Un privilegio poder pasear por estos arenales casi vírgenes, donde nada ni nadie nos va a molestar.

                                               

 Zonas dunares donde la empalizadas y paseos de madera nos permiten gozar de toda la flora y aromas que dan estas plantas de los arenales.La fragancia que exhalan es fuerte y penetrante.Toda una gozada para los cinco sentidos.

                            

  Playazo impresionante donde los haya con una quietud y paz desbordante, casi mística.

                                                                                     

La playa es descomunal, inmensa, fantasmagórica, interminable; todos estos calificativos son pocos para describirla y casi desértica entre cada zona de acceso, pues caminando por ella,  nos dimos cuenta que tiene varios puntos de acceso,  según de qué parte de la península se salga. Esta playa es para patearla un día y perderse en ella, donde la tranquilidad y la paz serán nuestras compañeras.

Tiene una zonas para naturistas aunque casi toda ella bien se podría catalogar de naturista  por su belleza y su tranquilidad, pues se pude andar varios kilómetros y no atisbar ni un alma en todo el horizonte.
La playa de Tavira tiene otras entradas por las que podemos acceder a ella como es en Pedras do Rey. Aquí el acceso se puede hacer  a pié . La distancia es de unos 800 mts. Si no queremos caminar podemos coger un trenecito que en poco más de 5 minutos nos dejará a pié de playa en otra zona urbanizada y cerca de la cual podemos acceder a la playa nudista del Barril.Esta es la opción más recomendable.